sacrificio y penitencia
Nunca fuiste de hablar demasiado Tu hábitat es el silencio te hice hueco para que vieneras y te fueras a tu antojo querias el mejor sitio, yo te di el hueco entre mis piernas. Querias ser dios, eras dios, aun lo eres cuando te quedas a dormir. Aún te rezo, cuando no tengo nada a lo que aferrarme, o cuando me aterra estar bien sin ti Siempre acudes, reluciente, y me ofreces tus brazos, me dejaste sin los míos Entonces soy un autómata a las órdenes de tu número Peregrinaje, sacrificio y penitencia Peregrinaje, sacrificio y penitencia Ningún altar es mejor que mi vida te di mi vida, en pequeños cachos te di lo mejor, te di todo mi tiempo porque tu nunca quisiste solo tener mi cuerpo. La devoción no es fácil sé que puedo conseguir un mejor templo, donde quepa tu magnificencia, tu misericordia, tu silenciosa voz, la única que habla para mí Siempre tuya, hasta que nos reunamos por última vez donde naciste, En el cementerio.