Eva se suicidó

¿Qué puede hacer esta

palabra, 

nunca leída, nunca pensada; 

por tanto, qué puede hacer por ti

el verbo que te corroe, 

el ser consciente de que 

la vida acontece

como el árbol brota, 

como la sangre emana.?

Aún no eres tierra

ni quieres, en el fondo, 

pues el aire seduce 

como su caída adormece. 

Pero si tan solo pudieras

sumergirte. 

Si pudieras mirar 

los ojos de lo Otro. 

Si pudieras tan solo 

caminar el prado y 

adorar la hiedra que 

transita tus venas 

y las cubre de plata, 

que hierve de frío el 

sabor. 

Qué pasa si no es 

más que una orilla, 

el ser y el Amor,

en el mismo edificio 

en el que Eva se 

suicidó.

Comentarios

Entradas populares de este blog