Eva se suicidó
¿Qué puede hacer esta palabra, nunca leída, nunca pensada; por tanto, qué puede hacer por ti el verbo que te corroe, el ser consciente de que la vida acontece como el árbol brota, como la sangre emana.? Aún no eres tierra ni quieres, en el fondo, pues el aire seduce como su caída adormece. Pero si tan solo pudieras sumergirte. Si pudieras mirar los ojos de lo Otro. Si pudieras tan solo caminar el prado y adorar la hiedra que transita tus venas y las cubre de plata, que hierve de frío el sabor. Qué pasa si no es más que una orilla, el ser y el Amor, en el mismo edificio en el que Eva se suicidó.